Empezamos a explicar cuando una persona se siente cansada (Hipoglucemia), hay ciertas situaciones en las que los niveles de glucemia (azúcar en sangre) son bajos y hay que elevarlos lo antes posible. A lo largo del día lo lógico, es evitar estos descensos bruscos, así saber a incorporar el azúcar en nuestra dieta sana. Si por ejemplo hacemos solo una toma de azúcar al día, por ejemplo en el desayuno, estamos provocando cambios bruscos en lal glucemia. La ingesta hay que repartirla proporcionalmente en las idstintas comidas: de este modo, se controla mejor el azúcar sanguíneo. Si nos faltase, nuestro cuerpo irá recurriendo a ellas d forma gradual, en función de nuestras necesidades de energía. Pero, ojo, no lo tomes antes de irte a dormir; porque no solemos tener actividad por la noche y será más difícil eliminarlo.
Así podemos decir que no lo tenemos que eliminar de nuestra dieta, porque no solo es necesario, sino que además eliminarlo de la dieta, colo solemos hacer- no es sinónimo de perder peso. Porque según un estudio, no todos respondemos de la misma forma a la hora de metabolizar los alimentos (convertirlos en energía y quemarlos), puede ocurrir que ese azúcar que crees que te engorda y suprimes lo metabolices, en realidad, bien y rápido, y sin embargo estés negando a tu cerebro su principal alimento y así llegarás a estar cansada, irritable, te faltará concentración... y si estás a dieta, caerás en excesos: bollos y dulces. Así que toma tu dosis correcta de azúcar al día.